River recibió ayer a Independiente Rivadavia, por la novena fecha de la Copa de la Liga en la Zona A, y el Millonario pudo cortar la seguidilla de cuatro empates en fila. Lo hizo con el 2-0 mediante el doblete de Miguel Borja y así se subió a la punta de su zona, la que comparte con otros tres clubes como Barracas, Instituto e Independiente de Avellaneda, al que visitará el sábado en el clásico de la décima fecha.
El equipo de Martín Demichelis, quien recibió algunos insultos de los hinchas cuando la voz del estadio anunció la formación titular, salió con todo a buscar el partido y logró un asedio constante en el primer tiempo. Si bien la primera llegada, un intento de Victorio Ramis despejado por Franco Armani a los segundos, fue para la visita, después todo se dio para el local: un tiro al palo de Facundo Colidio y una atajada de Gonzalo Marinelli a este mismo y un errado de Rodrigo Aliendro tras el rebote precedieron al primer grito de la noche.
A los 21 minutos, Claudio Echeverri lanzó un córner desde la derecha que cabeceó al primer palo Miguel Borja. Después, La Banda no aflojó y, tras una tapada de Marinelli a Andrés Herrera, Borja estrelló otro disparo en el travesaño. Así, no sorprendió que aumentara a los 33, cuando Pablo Solari habilitó desde la derecha al colombiano, quien se dio vuelta y definió con un tiro que se desvió y dejó sin chances al arquero.
El fútbol millonario perdió vuelo en el complemento, donde en el arranque Herrera se topó con Marinelli, arquero de floja actuación que dio muchos rebotes en disparos rivales. Después, en la más clara visitante, Armani le contuvo un mano a mano a Matías Reali. A su vez, ya cerca del final el ingresado Franco Mastantuono remató por arriba de media distancia, cerrando así una noche donde el equipo de Núñez se puso de líder.
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