La banda de estafadores integrada por una familia y un amigo fue condenada este miércoles por catorce maniobras delictivas con las que embaucaron a comerciantes. “Los Fiesteros” contrataban servicios para cumpleaños vía celular y, una vez que se los llevaban a un domicilio en Chimbas, desaparecían con los juegos, mesas, sillas y hasta freezers y equipos de sonidos.
Los cuatro integrantes de la banda eran Fernando Alberto Caballero, su madre Yésica Esther Caballero, su pareja Tatiana Ayelén Tobal y su amigo Julio Ricardo Merenda, todos de la calle Oro en Chimbas. La ayudante fiscal Silvina Putelli y el fiscal Eduardo Gallastegui empezó a investigarlos en mayo pasado y desde entonces se fueron sumando más denuncias.
La primera que cayó fue Yésica Caballero. Su hijo Fernando fue detenido recién en agosto último, mientras que a principio de este mes apresaron a su pareja y a su amigo. El modus operandi de “Los Fiesteros” consistía en contactar vía Facebook y celular a comerciantes que alquilaban servicios para fiestas. En todos los casos, los embaucadores transferían dinero a modo de adelanto y así conseguían que les llevaran consolas de juego, metegoles, inflables, sillas, manteles, freezers, fonolas y hasta utensilios, entre otras cosas, con la excusa de celebrar un cumpleaños o otra fiesta familiar.
Los estafadores, que daban sus nombres, recibían los artefactos y juegos en la vereda de un domicilio de calle Oro, en Chimbas. Una vez que los comerciantes se retiraban, la familia Caballero desaparecía con todas las cosas. Para cuando los damnificados volvían a buscar el servicio, la gente del lugar les decía que allí no vivía ni conocían a los Caballero o a Tatiana Tobal.
La investigación en la UFI Delitos Informáticos y Estafas permitió establecer que Fernando Alberto Caballero cometió catorce maniobras de este tipo, además amenazó de muerte a dos de los comerciantes que le reclamaron que devolviera las cosas. Tatiana Ayelén Tobal, su mujer, estuvo involucrada en trece estafas. Yésica Caballero, su madre, participó en ocho fraudes y el cuarto implicado, Julio Merenda, en cinco.
Ayer miércoles, todos ellos junto con el abogado Mario Morán –su defensor- arribaron a un acuerdo de juicio abreviado con el fiscal Gallastegui y la ayudante fiscal Putelli. El juez de garantías Eugenio Maximiliano Barbera refrendó las condiciones de lo pactado y sentenció a Fernando Alberto Caballero a 5 años de prisión de cumplimiento efectivo. Este tenía antecedentes y por eso lo enviaron al penal de Chimbas.
Yésica Caballero, su madre, al igual que a Tatiana Tobal y Julio Merenda recibieron una pena de 3 años de prisión de cumplimiento condicional, esto significa que no irán a cárcel.
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