Un ataque de furia por no querer comer la cena que estaba haciendo su pareja, hizo que Fabián Santivañez cometiera una vez más un nuevo acto de violencia, esta vez amenazando con un cuchillo a la madre de sus hijos. El sujeto fue condenado este martes y deberá cumplir casi dos años de prisión en el Servicio Penitenciario Provincial.
Santivañez ya tenía antecedentes por violencia de género, incluso contaba con una medida perimetral para no acercarse a la casa de quien fue su pareja durante 22 años y con quien tiene seis hijos. La mujer comentó que siempre se vio inmersa en un ámbito de violencia incluso manifestó ser golpeada como si fuera un animal, ya que siempre la dejaba con muchas marcas.
Lo cierto es que el pasado 11 de noviembre la pareja se encontraba en esa vivienda del Barrio Dominguito en 9 de Julio. Santivañez estaba tomando cerveza y ya estaba algo borracho cuando comenzó a reclamarle que él y sus hijos siempre comen guiso. Cerca de las 21 cuando la mujer empezó a cocinar, Santivañez entró a la cocina, destapó la olla y comenzó a gritar: “Hija de p… me vas a dar guiso” y tiró un espiral para los mosquitos dentro de la comida. Luego le dio una piña en la espalda y le dijo “te estoy hablando a vos, no vamos a comer guiso”, por lo que ella salió y se sentó afuera.
El hombre comenzó a pedirle que hiciera pizzas, que ellos no iban a comer eso. La ama de casa tomó dinero y fue a comprar fiambre y pan. Cuando la señora estaba junto a hija de 15 años preparando unos sanguches, el sujeto agarró la bolsa de fiambre y la tiró en la mesa de la cocina. Luego le pidió a su hija que le pida plata a su abuelo para comprar milanesas pero como el hombre le dijo que no tenía plata, Santivañez se enojó nuevamente y comenzó a insultar a su padre, incluso quiso romperle la moto. El padre del agresor salió a la calle y fue ahí que el violento agarró una punta de acero de 14 centímetros de largo y amenazó a la mujer. La hija de la pareja, de 15 años, fue quien llamó a la policía quien llegó y aprehendió al agresor.
Este martes se llevó a cabo el juicio abreviado y se condenó al imputado a sufrir la pena de un año de prisión de cumplimiento efectiva, y debido a que desobedeció a una orden judicial, se unificó la pena dictando una condena de un año y siete meses de prisión de cumplimiento efectivo.
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